Damos gracias a Dios porque sigue creyendo en un mundo bello y sin dolor, en un mundo en que los cristianos podemos sanar a los que lo necesitan
También damos gracias a Dios por la paciencia que tiene con nosotros, con nuestros fallos… Nunca se cansa de estar con nosotros.
Señor, llena nuestros corazones de tu paz. Ayúdanos para que no nos quedemos en palabras bonitas y seamos testigos de la alegría y de la esperanza.
Que vayamos regalando la luz, la compasión, la vida y la paz que tú nos traes en esta Navidad.