Para pensar … |
En este pasaje del Evangelio vemos que hay personas que necesitan ver para creer. Y hay otras
personas que creen sin ver. No es que Tomás fuera peor persona que los demás; de hecho,
cuando se da cuenta de que es realmente Jesús, lo reconoce de inmediato y le dirige palabras muy cariñosas.
Ser creyente tiene mucho que ver con creer sin ver, con ser capaces de seguir a Jesús y vivir como Él quiere, sin que le tengamos físicamente a nuestro lado. Está claro que la fe es creer sin ver, porque creer en lo que se ve no se puede, porque eso no es creer. Ser cristiano supone arriesgarse y dar un salto a lo desconocido. Es una aventura maravillosa.
Para rezar … |
- Gracias, Jesús, porque tu resurrección nos llena de alegría.
- Gracias, Jesús, porque tu quieres que un día nosotros también resucitemos y vivamos felices a tu lado.
- Gracias, Jesús, por la paz que nos das cuando acudimos a Ti.
- Gracias, Jesús, por el amor que nos tienes y por lo bueno que eres con nosotros.
- Gracias, Jesús, porque nunca te olvidas de nosotros.