El video del Papa, octubre de 2024. Por una misión compartida

“Somos comunidad”. nEsta es una de las palabras que nos dice el Papa en el mes de octubre.

Francisco nos recuerda la importancia de caminar juntos y “corresponsabilizarnos de la misión de la Iglesia”. Remarca también que los sacerdotes no son “los jefes de los laicos, sino sus pastores”, y que “Jesús nos ha llamado a unos y a otros. No a unos por encima de los otros, ni a unos por un lado y a otros por el otro, sino complementándonos. Somos comunidad”.

Por eso, consagrados, laicos, sacerdotes, todos los cristianos debemos “dar testimonio con nuestras vidas”, ofreciendo siempre lo mejor desde lo que sabemos hacer.

En El Video del Papa  del Papa Francisco nos resume este mensaje de gran importancia en una breve frase: “somos corresponsables en la misión, participamos y vivimos en la comunión de la Iglesia”

🙏 “Oremos para que la Iglesia siga apoyando por todos los medios un estilo de vida sinodal, bajo el signo de la corresponsabilidad, promoviendo la participación, la comunión y la misión compartida entre sacerdotes, religiosos y laicos”.

Todos los cristianos somos responsables de la misión de la Iglesia. Todos los sacerdotes. Todos.

Los sacerdotes no somos los jefes de los laicos, sino sus pastores. Jesús nos ha llamado a unos y a otros. No a unos por encima de los otros, ni a unos por un lado y a otros por el otro, sino complementándonos. Somos comunidad. Por eso debemos caminar juntos recorriendo el camino de la sinodalidad.

Claro, ustedes me pueden preguntar ¿qué puedo hacer yo, conductor de autobús?, ¿yo, campesina?, ¿o yo, pescador? Lo que tenemos que hacer todos: dar testimonio con nuestras vidas. Y corresponsabilizarnos de la misión de la Iglesia.

Los laicos, los bautizados, están en la Iglesia en su propia casa, y tienen que cuidarla. Lo mismo que nosotros, los sacerdotes, los consagrados. Cada uno aportando lo que mejor sabe hacer. Somos corresponsables en la misión, participamos y vivimos en la comunión de la Iglesia.

Oremos para que la Iglesia siga apoyando por todos los medios un estilo de vida sinodal, bajo el signo de la corresponsabilidad, promoviendo la participación, la comunión y la misión compartida entre sacerdotes, religiosos y laicos.