Gracias Jesús para limpiar nuestras «costras» exteriores que nos hacen tener un corazón limpio y puro.

  • Por tener unos padres y abuelos, catequistas y profesores que nos aceptan tal como somos. ¡Gracias Padre!
  • Porque con la ayuda de Dios todo es posible, nuestra mente se abre y nuestra esperanza se hace mayor. ¡Gracias Padre!
  • Por haber tenido la possibilidad de crecer en la fe de un Dios que ama al necesitado, que se apiada del débil, que salva al humilde. ¡Gracias Padre!