Domingo XXXIII de tiempo ordinario / C / 2019

Leer la Palabra de Dios

Leer la Hoja Dominical

 

 

Lectura Espiritual

En este sentido -el de personalizar en la oración- el tema de la mirada ocupa un lugar central. Una persona suele entrar en contacto con otra -antes de con la palabra- con la mirada. Veamos en este sentido el ejemplo de las dos Teresas.

Para la de Ávila, la mirada es una de las categorías que más frecuentemente usa, y también con más gusto, para definir el acto de orar. Con esta palabra indica radicalmente la actitud de la persona puesta en oración. Poniéndonos en soledad, ¿qué pide ella? ¿Qué tenemos que hacer? “No os pido ahora que penséis en Él, ni que saquéis muchos conceptos, ni que hagáis grandes y delicadas consideraciones con vuestro entendimiento; no os pido más que le miréis”.

Esta actitud de presencia, esta salida, es nuestra primera conversación, nuestra vuelta inicial hacia Él, nuestro éxtasis del yo al Tú. Él, mirándome está. Los que oran están viendo que los mira. La Santa une en una sola frase la actitud de Dios y del hombre: Mire que le mira. Mirada de amor, respuesta a otra mirada previa, envolvente. Orar es voltearse a ver un Dios que está vuelto hacia nosotros, atento a cada uno, mirándonos.

Teresa de Lisieux, por su parte desea leer su mirada cuando ora: Intuyo en tu mirada mi futuro. Su dicha es saberse mirada. Los textos se multiplican: me hace feliz tan solo tu mirada, con una mirada de amor me sigues siempre; esa mirada tuya me ha herido; Para poder soportar el destierro / de este valle de lágrimas, / de mi amado necesito la mirada. La mirada divina, que se posa con amor sobre su criatura y le da vida y belleza, es uno de los grandes temas sanjuanistas. ¡Qué lejos está este primer encuentro oracional con el de quien teme a un Dios “vigilante”, airado por el pecado, a un Dios ausente o impersonal! Esa mirada de amor recíproca e incesante está en el corazón mismo de la vida contemplativa de los santos. Y debería estar en la nuestra, si realmente buscamos a una Persona cuando oramos.

Ricardo Sada; Consejos para la oración mental