Unas sesenta personas quisieron participar de esta merienda, que comenzó con una proyección de vídeo de Manos Unidas, un pequeño concierto de órgano y violín y, a continuación, se procedió a la merienda con una gran participación tanto de voluntariado, como de salouenses que no quisieron faltar a la cita anual de Manos Unidas Salou. Mientras tanto, tuvo lugar el sorteo de varias experiencias y regalos para seguir recaudar fondos para la educación de un total de 600 niños que trabajan en la fábrica de ladrillos de Pune, al oeste de la India, un proyecto que Manos Unidas tiene actualmente en marcha con una duración prevista de 3 años.
La Merienda del Hambre de Salou contó con la colaboración del Ayuntamiento de Salou, PortAventura, los restaurantes LeSommelier y La Venus de Pepe y los establecimientos La Vinoteca de Salou, Lilac Calzados, Frutas y verduras J. Rofes y Frutería Trini.