Jornada entrañable en nuestras parròoquia en el Encuentro Diocesano de Jóvenes
Josep M.
Este sábado 4 de mayo nuestra comunidad parroquial acogió el Encuentro Diocesano de Jóvenes. El encuentro ya hace meses que se estaba organizando, en la que miembros de nuestra parroquia se han coordinado sobre todo para preparar la infraestructura, pidiendo instalaciones y servicios a la del ayuntamiento. Y claro, acogiendo a los jóvenes en la celebración de la Eucaristía que fue presidida por Mns. Jaume Pujol, administrador apostólico de la diócesis, y también la última parte del encuentro, la cena y la sesión festiva.
La jornada comenzó en el Teatro Auditorio de Salou (TAS) a primera hora de la tarde, con la bienvenida de Mons. Jaume Pujol, Mn. Josep Mateu, delegado diocesano de Juventud, Mn. Santi y del Sr. Pere Granados, alcalde de Salou. Seguidamente, los jóvenes participantes se dividieron por edades para poder conocer y trabajar la vocación y el testimonio de santidad de un personaje diferente: un joven surfista, médico y seminarista, que murió en el mar, Guido Schaffer; una joven religiosa entregada a los más necesitados, Clare Crockett, y santo Óscar Romero.
Al mismo TAS y en un momento muy emotivo, se recibió la cruz de Mosul portada por los mismos jóvenes. La cruz, procedente de la iglesia siro-ortodoxa de San Simón de Bartella, en las afueras de Mosul (Irak), forma parte de un Viacrucis de pared y tiene claras marcas de haber sido quemada a causa de un incendio. También se contó con el testimonio de un joven cristiano de Irak que, junto con su hermano, ha tenido que irse de su casa debido a su fe.
A continuación, en procesión por las calles de Salou, acompañados de palmas y música, los jóvenes se dirigieron a la iglesia parroquial de Santa María del Mar de Salou donde se celebró la eucaristía, donde Mns. Jaume con un tono de despidida, esa misma mañana se hacía público su relevo como pastor de nuestra diócesis, les dijo, «Queridos jóvenes, debe ser obra del Espíritu Santo haber comenzado mi episcopado con jóvenes y que , hoy, un día tan significativo para vosotros como es este encuentro sea para mí el final de mi episcopado. Empecé con vosotros y acabo con vosotros. Sois un don para la Iglesia, sueldo la alegría, la llama viva e inquieta, nuestro futuro. Gracias por acompañarme aquel primer día, gracias por acompañarme hoy y para dejaros acompañar».
La celebración se cerró venerando la cruz de Mosul seguida de la cena y el concierto a cargo a cargo de DJ Nira.