Sí, sí, estamos no ya a contrarreloj, sino en el sprint final para poder celebrar la primera misa mañana, las últimas 36 horas. La iglesia más que nunca se ha convertido en un hormigueo de operarios, arriba y abajo, cada uno en su tarea: paletas, pulidores, carpinteros, electricistas, técnicos de sonido, cristaleros, los montadores de los bancos, … En las fotos podéis ver algunas de estas tareas.
Hoy, una vez hayan desaparecido todos, se hará una limpieza a fondo y mañana sábado, otro gurpo de personas, ahora colaboradores de la parroquia, terminarán de poner algunas de las cosas en su lugar para poder celebrar dignamente la Eucaristía vespertina del Domingo de Ramos. En la próxima entrada ya sólo mostramos imágenes de la iglesia, ya a punto…. Esperemos!
Clicar encima de las fotos para verlas más grandes.